A pesar de las predicciones meteorológicas, que anunciaban precipitaciones durante todo el día, Nuestro Padre Jesús del Soberano Poder, Titular de la Hermandad de San Gonzalo, salió finalmente hacia la Catedral de Sevilla, eso sí, dos horas más tarde. El motivo no era otro que el de presidir el Via Crucis que anualmente organiza el Consejo Gnral. de HH. y CC. de Sevilla en el mayor templo hispalense. Para ello, el Cristo fue portado en andas, cedidas por la Hdad. de los Gitanos, con cuatro faroles en las esquinas, cedidos por la Hdad. de la Calle Real de Castilleja de la Cuesta. La Imagen estrenaba potencias de oro, del Taller de Fernando Marmolejo, y, por primera vez en su historia, una túnica bordada en oro, de terciopelo morado, obra de Mariano Martín Santoja según diseño de Fco. Javier Sánchez de los Reyes.
En poco más de una hora, el Stmo. Cristo alcanzó la Catedral, y el Via Crucis se llevó a cabo con normalidad, más lento de lo habitual y a excepción de la presencia de las cruces de guía de las distintas hermandades, que previamente habían sido desconvocadas.
De regreso, salió en torno a las 23h. y entró en su templo del Tardón pasadas las 00:00h.
En poco más de una hora, el Stmo. Cristo alcanzó la Catedral, y el Via Crucis se llevó a cabo con normalidad, más lento de lo habitual y a excepción de la presencia de las cruces de guía de las distintas hermandades, que previamente habían sido desconvocadas.
De regreso, salió en torno a las 23h. y entró en su templo del Tardón pasadas las 00:00h.
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